Última actualización: 12/09/2025 12:17
Un video de incitación a la violencia se hizo viral en Portugal y expuso la creciente xenofobia que enfrenta la comunidad brasileña, la más grande en el país. En la grabación, el hombre de 56 años, utilizando el término despectivo «zuca», ofrece una recompensa de 500 euros por cada brasileño asesinado.
Tras la rápida difusión del video y las múltiples denuncias recibidas, la Policía Judicial de Portugal arrestó al sujeto. Su empleador, una panadería local, emitió un comunicado condenando el racismo y la discriminación, y anunció su despido inmediato.
El sospechoso, que ya tenía antecedentes penales por otros delitos, ahora enfrenta un proceso judicial por incitación a la violencia. Será interrogado para determinar las medidas cautelares adecuadas.
Aumenta la xenofobia contra la comunidad brasileña
Este incidente no es un caso aislado. Expertos y organizaciones sociales, como la Casa de Brasil en Lisboa, han denunciado que los discursos de odio contra los brasileños están en aumento. Ana Paula Costa, presidenta de dicha organización, calificó el incidente como «la expresión más perversa, violenta y criminal anti-migratoria».
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Con casi 700,000 brasileños viviendo en Portugal, esta comunidad es la más grande del país. Sin embargo, datos de la Agencia para la Integración, la Migración y el Asilo revelan que el 54% de los brasileños ha reportado sufrir algún tipo de discriminación, la tasa más alta entre todos los grupos de inmigrantes.
Las leyes no garantizan la dignidad
La abogada penalista Renata Amorim señala que la legislación portuguesa no tipifica la xenofobia con el mismo rigor que en Brasil, lo que podría estar influyendo en la situación actual. Según Amorim, esta deficiencia legal presiona al poder judicial a interpretar las leyes de forma que se garantice la dignidad de las personas y se detenga el avance de la violencia.
